Para poder hacer una chimenea de forma adecuada es importante que utilicemos los ladrillos refractarios. Estos están fabricados con cerámica y además cuentan con unas propiedades térmicas muy consistentes, por lo que resisten altas temperaturas con facilidad.
Pegar ladrillos refractarios en una chimenea no es una tarea demasiado complicada, pero hay que tener muy en cuenta el pegamento que vamos a utilizar, puesto que va a ser la base de todo el proceso.
Decimos esto porque el pegamento también debe ser especial, ya que debe tener las mismas o más propiedades térmicas que los propios ladrillos.
Pero el pegamento no es el único material que vamos a tener que utilizar para pegar ladrillos refractarios en una chimenea. Si quieres realizar el proceso con éxito apúntate los demás materiales y herramientas que vas a necesitar:
Herramientas para pegar ladrillos refractarios en una chimenea:
- Cepillo
- Balde
- Cuchara de albañil
Materiales para pegar ladrillos refractarios en una chimenea:
- Ladrillos refractarios
- Pegamento especial
- Agua
Pasos para pegar ladrillos refractarios en una chimenea:
Los ladrillos refractarios se pueden colocar en diferentes piezas, como los hornos, las parrillas y cómo no, las chimeneas. Se pueden aplicar en lozas de hormigón o revoques de cemento sin que pierdan sus propiedades. Para pegar este tipo de ladrillos atiende a los pasos que te contamos a continuación:
- Limpia la chimenea con un cepillo resistente para que no quede ningún resto de polvo o grasa. Después prepara la mezcla adhesiva. Para ello tienes que echar en un balde por cada bolsa de 10 kilos unos 3 litros de agua.
- Mézclalo todo bien hasta que se forme una pasta espesa, pero procura que no tenga imperfecciones.
- Echa la pasta en la superficie ayudándote con una cuchara especial para albañilería. Luego pasa la llana por la misma. Lo ideal es que hagas uso de la técnica de doble untado.
- Vuelve a expandir la mezcla en los bordes de los ladrillos para obtener un mejor acabado y facilitar la colocación.
- Ve colocando las piezas una a una según el tamaño y diseño que tenga la chimenea y presiona fuerte en la superficie para que se fijen bien los ladrillos.
- Deja secar al menos durante 24 horas para que los ladrillos no sufran ningún daño ni se muevan de su sitio.
Consejos adicionales:
- Se recomienda no encender el fuego en la chimenea unos días para no provocar daños en los ladrillos.
- Es conveniente saber que hay dos tipos de ladrillos, los que están hechos con alúmina y los de sílice. Sea cual sea el que elijas intenta siempre escoger aquellos que tienen un mayor porcentaje de estas sustancias, puesto que tienen más calidad y son más resistentes.